sábado, 15 de junio de 2019

EZCARAY. ERMITA DE SANTA BÁRBARA

Situado en la comarca de la Rioja Alta, el municipio de Ezcaray fue fundado por los reyes navarros en el siglo X. Su nombre, derivado del euskera significa "peña alta" en referencia a la picota de San Torcuato que se alza a la entrada del valle. Ezcaray ocupa el tercer puesto en cuanto a extensión entre los términos municipales de la Rioja. Con una historia dilatada, Ezcaray posee un gran patrimonio forestal y uno de los conjuntos de arquitectura popular riojana más interesantes, bellos y bien conservados y por ello goza de un singular atractivo natural y tirón turístico.


De sus monumentos, la Ermita de Santa Bárbara que se encuentra en la cima del monte y mismo nombre que el municipio: Ezcaray.

Su fiesta es una de las más célebres y atractivas del municipio y se celebra el lunes de Pentecostés.
La fábrica de la ermita de una sola nave, fue reconstruida en el siglo XVI en piedra de sillería y mampostería sobre una anterior de forma circular. Su origen se remontan a una torre de vigilancia del siglo XI. En un periodo de gran inestabilidad y guerras, en puntos estratégicos de valle se levantaron varias de éstas torres; cumplido su cometido y llegado el tiempo de estabilidad y asentamiento de la población las torres fueron reconvertidas en ermitas y curiosamente, la mayoría dedicadas a Santa Bárbara por la propia iconografía (su atributo es una torre) de la santa y mártir. Entre los gremios a los que proteje están los campaneros.