Ea, Que eres como una perla
Hola, Que los niños te adoran
Oye, Que te rondan pastores
Vaya, Que eres sol refulgente
Niño del alma, Niño del alma
Es el estribillo del cántico "EA" que se repite a cada estrofa de las 25 que componen uno de los villancicos más antiguos de la cristiandad, el conocido "DIVINOS VERSOS EN OBSEQUIO Y ALABANZA DEL DULCE NOMBRE DE JESÚS", historia-relato centrado en el Nacimiento del Mesías de un autor no conocido del medievo que se cree fueron escritos para la fundación de la cofradía local del Dulce Nombre de Jesús que cada año y cada día 1 de enero, organiza, promociona y escenifica en Palencia la popular fiesta del "BAUTIZO DEL NIÑO", una tradición con más de 500 años de historia que desde 2015 está declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. El escenario, la iglesia y barrio de San Miguel donde la celebración auna a cofrades, clero, personas, entidades, colectivos y voluntarios participando del genuino carácter religioso-popular-cultural-festivo bien desde dentro, bien en su organización o en su coparticipación y puesta en escena que cada año crece en volumen y vistosidad.
Previo a esta jornada alegre, sociable y dinámica existe un amplio programa de compromisos que lleva a cabo esta histórica cofradía de gran arraigo, solera y empeño en revitalizar cada edición del Bautizo del Niño con la sencillez, complicidad, trabajo y fidelidad de sus miembros y el apoyo de las instituciones palentinas. Su sede inaugurada en 1978, es el Palacio del Niño construido sobre uno anterior del siglo XV; lugar de hospitalidad y guadían del alma de la cofradía.
La procesión se inicia dentro del templo y continúa en la calle donde las andas con la imagen titular (Niño Jesús del siglo XVII) no solo se porta, sino que además "se baila" al ritmo del EA y como buen bautizo que se precie, tiene madrinas, coro, bendiciones, pedrea dulce e invitación generalizada que da lugar a una multitudinaria concentración de personas libres de asistir por tradición y devoción o sencillamente para verlo.