jueves, 9 de febrero de 2017

ENCANTADORA MEDINACELI



Mucho para decir de esta villa y largo para desmenuzar, que no es mi intención. Deseo sí, hacer una pequeña presentación en síntesis: Soria, segunda población en altura de Castilla y León. Medinaceli, se encuentra a 1204 msnm. Antes de la llegada de los romanos el Alto Duero estuvo poblado por tribus celtíberas. Los arévacos ocupaban las principales poblaciones y entre ellas Ocilis, actual Medinaceli. Considerada entonces como la de superior categoría artística e histórica. El municipio está declarado Bien de Interés Cultural y Conjunto Histórico (1963). Medinaceli conserva el encanto de ciudad medieval y el mayor atractivo para el visitante es hacer el recorrido urbano por su potente patrimonio. El Arco Romano de aspecto desgastado por el frío, las lluvias y el viento, edificado sobre una colina y único en España con triple arcada. La Colegiata de Nuestra Señora de la Asunción. La amplia Plaza Mayor y antigua ubicación del foro romano. El Palacio Ducal. El Palacio del Marqués de Casablanca. La Alhóndiga. El convento de Santa Isabel y la iglesia románica de Santa María la Mayor. La ermita del Humilladero. El Castillo. La Fuente de la Canal que recibe el agua de las canalizaciones construidas por los romanos. Y la muralla, los restos árabes, las calles empedradas, las casonas, los soportales, las referencias al Cid... Atributos que la hacen merecedora de estar en la red de los pueblos más bonitos de España, vamos, que encanta por su esplendoroso pasado, diversidad y particularidad. Tampoco hay que pasar por alto su riqueza paisajística. En sus tierras nace el Jalón y desde época romana explota unas blancas salinas. Y de remate, ofrece buenos lugares para el buen comer. Medinaceli es un completo para una estancia corta, diferente y provechosa aunque sea invierno por su luz, sus colores, sus vacíos y silencios... la forma más discreta y afable de empezar a amarla.